Golf en las montañas checas

Un campo de golf perfectamente diseñado, instalaciones de máxima calidad, un restaurante, una tienda profesional y en el horizonte, la poderosa silueta de la montaña de Ještěd, con el hotel mundialmente conocido en su cima. Este es el Ypsilon Golf Resort Liberec. Aquí le espera un campo de 18 hoyos tipo inglés, con una longitud total de más de 6.000 metros con un par 72. Gracias a que el terreno está ondulado y fragmentado atractivamente y, además, alejado del bullicio de la civilización, disfrutará aquí de una partida de su deporte favorito sin que nada la perturbe.

Después de un buen juego, apetece una buena comida

Después de un torneo exitoso en los greens del Ypsilon Golf Resort, puede sentarse en un agradable restaurante con vistas al campo de golf o al jardín de invierno, lugar ideal para charlar tranquilamente y evaluar el juego o trazar nuevas estrategias. El menú deleitará sobre todo a aquellos que gusten de especialidades checas, pero los que prefieran la cocina internacional encontrarán aquí lo suyo. El Ypsilon Golf Resort también dispone de una academia de golf, que ofrece numerosos cursos tanto para principiantes como para avanzados.

Golf en el tejado de Bohemia

¿Qué sensación podrá tener alguien que golpee la pelota de su vida disfrutando de unas impresionantes vistas a las montañas más altas de la República Checa? Puede probarlo en el campo de golf de Mladé Buky, situado en el seno de las montañas de Krkonoše, que ofrece una de las vistas más hermosas del país. Encontrará aquí un campo de golf de 18 hoyos de máxima calidad, así como un campo de 6 hoyos con greens de prácticas con chipping y putting y un driving range, incluyendo las instalaciones y la iluminación.

Una vista fantástica de las montañas dominantes de Krkonoše

El campo de golf de Mladé Buky fue proyectado para el máximo aprovechamiento de su situación geográfica y lograr un juego atractivo, siendo otras de las finalidades, el ofrecer al jugador las vistas más hermosas del pico checo más alto, Sněžka, la montaña Černá hora y las preciosas colinas de Vraní vrchy. Después de un día placentero pasado en el campo de golf, puede hacer uso de los servicios del elegante hotel aledaño, con un restaurante de época, y relajarse agradablemente optando por alguno de los programas de bienestar.