¿Buscas inspiración para las vacaciones de otoño? ¡Los balnearios checos y sus célebres visitantes!
¿Estás pensando en tomarte unas vacaciones relajándote en un balneario pero no sabes en cuál? Podemos recomendarte los balnearios de Moravia y Bohemia. Su calidad está reflejada en su larga tradición y sus clientes satisfechos, tanto en la actualidad como en el pasado. Déjate inspirar por los grandes del mundo como lo fueron Ludwig van Beethoven, Frédérik Chopin, Johann Wolfgang von Goethe, Petr I, la emperatriz Sissi o el primer presidente checoslovaco Tomáš Garrigue Masaryk. Éstos visitaron los balnearios de Bohemia y Moravia varias veces. Venían en busca de tranquilidad y buen ambiente. Los balnearios de Moravia y Bohemia como Karlovy Vary, Mariánské Lázně o Luhačovice eran y son lugares en los que merece la pena estar.

Balnearios de Bohemia del Oeste como cura para los corazones rotos

Los balnearios de Bohemia del Oeste, gracias a su ubicación perteneciente al triángulo de balnearios, jugaron un importante papel en la historia de la República Checa y compiten por tener un lugar entre los representantes checos de la lista de la UNESCO. También jugaron un papel importante en el destino de un compositor y un poeta. Concretamente se trata del genio Frédéric Chopin y del maestro alemán Johann Wolfgang von Goethe. Ambos utilizaron la atmósfera balnearia de los balnearios, de Bohemia del Oeste, para recuperarse de sus corazones rotos.

Frédéric Chopin visitó Mariánské Lázně para poder estar cerca de su amada, la joven artista Maria Wodzinska. Estuvo esperando más de un mes en el pintoresco balneario rodeado de profundos bosques ansiando el matrimonio. Finalmente, los padres de Maria acordaron un matrimonio por conveniencia y Chopin se quedó con el corazón roto. Por otra parte, a Mariánské Lázně le queda un monumento por el célebre visitante: el monumento de Chopin y el festival anual celebrado en honor a Chopin. El compositor polaco, por supuesto, no fue el único que pasó su tiempo en Mariánské Lázně. En la lista de célebres visitantes también se encuentra Franz Kafka, Sigmund Freud o Thomas Alva Edison.

Johann Wolfgang von Goethe amaba tanto los balnearios de Bohemia del Oeste que incluso barajó la posibilidad de mudarse a su centro neurálgico, a Karlovy Vary. Quedó impresionado por la forma en la que la salvaje naturaleza se transformaba en elegantes ciudades llenas de celebridades de la época y cultura. Goethe visitó Karlovy Vary trece veces y pasó aquí tres años de su vida. Aunque también visitó Teplice, Františkovy Lázně o Mariánské Lázně. Y precisamente en el último, conoció a su último amor, a Ulrike von Levetzow, de 17 años. El camino de su amor se vio truncado por la madre de Ulrike, quien les corto sus planes románticos. El motivo fue la edad del poeta alemán. Por aquél entonces, cuando conoció a Ulrike, tenía 72 años. Desgraciadamente, no hubo ningún “final feliz”, Goethe murió diez años más tarde. Aunque, es bueno saber que el beneficioso ambiente de los balnearios de Bohemia del Oeste hace amantes hasta a los senior. 

Karlovy Vary atrae a celebridades hasta en la actualidad. Vienen para relajarse aunque, en los últimos diez años, también tienen otro motivo para visitar la ciudad balneario y es por el Festival de Cine Internacional, el mayor evento cultural de la República Checa. Debido a este evento cinematográfico, siempre a comienzos de julio, visitan Karlovy Vary famosos como Richard Gere, Sharon Stone, Antonio Banderas, Renée Zellweger, Oliver Stone, Jamie Dornan y muchos más.

Triángulo de balnearios y estilo de vida sana

Ludwig van Beethoven fue una de las personas que visitaron los balnearios de Bohemia del Oeste con fines curativos. En Teplice se estuvo tratando contra la sordera. Pero no le resultó un impedimento para que, desde aquí, trabajara en su 7ª y 9ª sinfonía. Beethoven también visitó Karlovy Vary, donde ahora descansa un monumento en su honor, en tamaño aumentado. Podrás acceder a el desde el centro de la ciudad. Tu destino es uno de los monumentos más bonitos del mundo destinados a Beethoven.

El zar ruso Petr I Veliký también visitó Karlovy Vary con fines curativos. Por primera vez, en el año 1711 y por segunda vez, cuando su estancia balnearia tuvo éxito, en el año 1712. Durante sus visitas, sorprendía a los habitantes locales por sus esfuerzos físicos. Por ejemplo, una vez, tras todo el día, ayudó a unos obreros con la construcción de “Dům u Páva”, donde hay un panel en su memoria. Otra vez, subió al miradorJelení skok” (Salto del ciervo) en un caballo sin montura. Si visitas Karlovy Vary, podrás comprobar por ti mismo, la dimensión de la colina. 

La popular emperatriz austríaca Sissi también fortaleció su condición física en Bohemia del Oeste. Es famosa por su belleza y elegante figura, en lo que trabajaba duramente. Por lo tanto, era indulgente en sus largos paseos a pie y caballo. Y los bosques que rodean los balnearios de Bohemia del Oeste le proporcionaban una excelente oportunidad. Incluso se comenta que durante sus paseos alrededor de Karlovy Vary, la pequeña Sissi le sacaba una gran ventaja a su guardaespaldas. No es que intentara huir. Pero cuando la entrenada emperatriz se ponía a dar un paseo, resultaba difícil seguirla con su agitado paso y la agilidad con la que esquivaba cualquier obstáculo.

Balnearios en Moravia

Al oeste de la República Checa, en Moravia, también te toparás con varias opciones donde disfrutar de la atmósfera balnearia. Por ejemplo, a Luhačovice iba la “crème de la crème” de la sociedad de Checoslovaquia de la época de la I República. Uno de los representantes es el primer presidente checoslovaco, Tomáš Garrigue Masaryk, quien incluso concertó una reunión oficial en este lugar. El célebre arquitecto Dušan Jurkovič, quien les dio a sus pintorescas casas formas fantásticamente únicas, también visitó Luhačovice.

También disfrutaron de la tranquilidad balnearia de Luhačovice el célebre compositor checo Leoš Janáček o el popular cómico Vlasta Burian.