Ferrocarriles de montaña
La República Checa ofrece un sinfín de experiencias para los amantes de la naturaleza y el turismo activo. Las montañas checas más altas, los Montes Gigantes, son fácilmente accesibles en tren. Los montes Jeseníky son otro de los lugares montañosos hasta los que se puede llegar en ferrocarril. El llamado Semmering de Silesia ofrece impresionantes vistas de las crestas montañosas. El ferrocarril atraviesa varios valles, que los trenes cruzan mediante enormes viaductos. Las paradas ideales son Ramzová, la estación de tren rápido más alta de la República Checa, Ostružná y, ocasionalmente, Malá Morávka. También se puede tomar el tren hasta Loučná nad Desnou, que permite visitar el embalse de Dlouhé stráně o la fábrica de papel artesanal de Velké Losiny.
El Parque Nacional de Šumava es otro destino muy popular. Desde Praga o Pilsen se puede tomar un tren hasta Klatovy y luego hasta Železná Ruda, la principal puerta de entrada a Šumava. Otra opción es ir a Vimperk o Volary vía České Budějovice. Los montes Metálicos se pueden explorar en la línea Karlovy Vary - Merklín o Karlovy Vary - Nejdek - Johanngeorgenstadt, desde donde se abren vistas de Sajonia.
También puede dar un paseo por el tren local de la región cristalera, en el norte de la República Checa. En Kamenický Šenov, visite el Museo del Vidrio y descubra un raro fenómeno natural, Panská skála.
Trenes panorámicos
¿Le encantan las vistas del paisaje que le rodea y quisiera disfrutarlas un poco más? Entonces hay un exclusivo tren panorámico suizo para usted, que circula por la línea de Graz (Austria) a Przemyśl (Polonia). En la República Checa, puede tomarlo desde Moravia del Sur hasta Silesia, desde Břeclav hasta Bohumín. Gracias a las grandes ventanas panorámicas arqueadas, los pasajeros tienen hasta un 90% más de visibilidad.
Trenes nostálgicos
La línea de tren cremallera más empinada y a la vez la única de la República Checa, que une los hermosos montes Jizera con las majestuosas Montañas de los Gigantes, circuló por primera vez en 1902. En la temporada de verano, puede ver locomotoras y vagones históricos en Tanvald gracias a los nostálgicos recorridos en tren con una excepcional locomotora de ruedas dentadas llamada Zamračená. En la República Checa no solo les ponemos nombre a las mascotas, sino también a los trenes.
En la línea de vía estrecha en la zona de Osoblaha le aguarda una experiencia extraordinaria. El ferrocarril de vía estrecha de Osoblaha, que forma parte de la singular ruta técnica del este de la República Checa, es considerado un monumento técnico. La locomotora de vapor se pone en marcha en mayo. Los eventos más populares incluyen el Tren embrujado al castillo de Slezské Rudoltice o el Tren gastronómico.
Conexión entre Europa y Praga
¿Dónde comer bien y disfrutar de una excelente gastronomía? Uno de los mejores destinos es Praga, donde podrá encontrar un sinfín de restaurantes que ofrecen la mejor cocina checa e internacional. Praga es accesible en trenes internacionales, como el European Sleeper o el Baltic Express. Otros destinos que ofrecen delicias gastronómicas y a los que se puede llegar cómodamente en tren son Olomouc, Brno, Karlovy Vary, Mikulov, Tábor, Plzeň, Hradec Králové y Ostrava. Viajar en tren en busca de buena comida es una forma ideal de combinar el placer de viajar con la degustación de especialidades regionales, incluidos los mercados de Navidad y de Pascua.
Viajar en tren es un modo de transporte increíblemente cómodo, seguro y respetuoso con el medio ambiente. En la República Checa celebraremos el Día Nacional del Ferrocarril en Nymburk el 20 de septiembre 2025. Se trata de un evento único en toda Europa, sobre todo por el número de objetos expuestos, desde las joyas más antiguas hasta la tecnología más moderna.
Más allá de la historia y el juego de Kigdom Come
Desde Praga, es fácil llegar a lugares como Mělník, en el norte de Bohemia, donde se pueden degustar excelentes vinos procedentes directamente de los viñedos del castillo, con impresionantes vistas de la confluencia de los ríos Elba y Moldava.
Otra opción es viajar a la perla de la UNESCO de Kutná Hora, donde se ambienta el popular juego Kingdom Come: Deliverance II. Ni siquiera tiene que alejarse mucho de Praga - puede experimentar una hermosa excursión de un día por la ruta de Nelahozeves. Allí, además de historia y naturaleza pintoresca, encontrará una exposición interactiva en la casa natal de Antonín Dvořák.
Si quiere disfrutar del vino, diríjase a Moravia del Sur
La región vinícola más famosa de Moravia del Sur es fácilmente accesible en tren. En Mikulov podrá probar los vinos locales con vistas al histórico castillo. Desde Brno, donde merece la pena tomar el tren para degustar delicias de primera clase de la cocina checa, puede continuar en tren hasta Znojmo, Bzenec, Valtice y Lednice (UNESCO), Velké Bílovice o Strážnice. Cada uno de estos destinos no solo ofrece excelentes vinos, sino también ricas tradiciones folclóricas.
