Pasaron ya 330 años del nacimiento del arquitecto que modificó la imagen de muchas ciudades centroeuropeas. Este arquitecto vivía en la era de pleno barroco y dejó sus huellas también en la República Checa de hoy, donde se han conservado unas 200 de sus obras. Muchas de ellas se consideran perlas de la arquitectura barroca y se mencionan también en la literatura de la historia del arte. ¡Anímate a hacer una excursión al pasado!
¿Quién era este personaje en realidad?
Kilian Ignaz Dientzenhofer nació en Praga el 1ro de septiembre de 1689, como quinto hijo de Christoph Dientzenhofer. Estudió filosofía y matemática en el liceo Malostranské. Guiado por su padre, se hizo constructor y entonces partió al extranjero a adquirir experiencia. En aquel entonces, los hijos adolescentes de familias ricas solían pasar uno o dos años viajando y Kilian, gracias a su padre, pasó ocho años estudiando en varias partes de Europa. Durante su viaje conoció obras de maestros del barroco. Vivió en Viena, Venecia, Milano, Florencia, Roma y Nápoles. En el año 1715 volvió a Praga donde, en colaboración con su padre, elaboró una serie de proyectos. Varias de las obras del padre fueron finalizadas por él. Se casó dos veces, tuvo en total dieciocho hijos. En los últimos años de su vida trabajaba con su yerno Anselm Lurago, y él, después de la muerte de su suegro, finalizó sus obras. Falleció el 12 de diciembre de 1751 en Praga y está sepultado en el cementerio Malostranský. Aparte de obras eclesiásticas ricas en ornamentos, diseñaba también obras rurales. Lo interesante es que creadores populares rurales lograron trasladar al siglo XIX los elementos más importantes de sus obras y este estilo se denomina “barroco labriego”. Las obras más destacadas construidas en el estilo de barroco labriego se encuentran en el pueblo de Holašovice en Bohemia del Sur. Este pueblo está inscrito en la lista de la UNESCO.Iglesias barrocas. Obras icónicas praguenses
La obra quizás más popular de Kilian Ignaz Dientzenhofer es la iglesia de San Nicolás en Malá Strana en Praga. Este fue el más grandioso de sus proyectos, se podría decir la obra de su vida. Comenzó a desarrollarlo en sus años de estudiante. En aquel tiempo la catedral era la obra principal de su padre. Posteriormente volvió, después de pasar años en viajes. Esta iglesia pertenece entre las obras de barroco más destacadas en Europa y, en general, se considera la obra más bella del barroco checo. Su cúpula majestuosa y torre delgada son partes inseparables del panorama del Castillo de Praga. También se puede ascender al campanario y disfrutar de espectaculares vistas a los tejados rojos praguenses y al zigzagueante río Moldava. Cuando visites la iglesia, no olvides fijarte en su órgano. Lo tocaba Wolfgang Amadeus Mozart.Kilian Ignaz dirigió la construcción de varias otras iglesias praguenses. Por ejemplo, la catedral de Santa Margarita en la zona del Monasterio de Břevnov, el monasterio más antiguo en las tierras checas, fundado en el año 993. La comunidad de frailes que reside aquí te recibirá los fines de semana cuando se efectúan visitas comentadas por el área del monasterio, incluyendo la catedral de Santa Margarita. Entre otras obras praguenses podemos mencionar, por ejemplo, Loreta en Hradčany, Invalidovna en Karlín, una parte de Klementinum o la iglesia de San Nicolás en Ciudad Vieja. El arquitecto construyó en Smíchov un chalet privado para su familia. En la actualidad lleva el nombre Portheimka y es sede del Museo del Vidrio.