Adornos de perlas de vidrio de Bohemia

Perlas de vidrio de Bohemia

En el pueblo Poniklá, en Bohemia del Norte, se fabrica lienzo desde la era medieval. No obstante, al paso del tiempo, las manufacturas locales llegaron a especializarse en la producción de perlas de vidrio, una labor más rentable. A principios del siglo XX, la producción de perlas y la fabricación de bisutería representaban el sustento para más de 400 familias en Poniklá y alrededores. Un fabricante de perlas hábil lograba fabricar en un día hasta tres mil quinientas perlitas de diversas formas —largas, en forma de pera, redondas, pequeñas y más grandes, de vidrio transparente, de color, liso y ranurado—. En tiempos remotos, las perlitas se utilizaban para fabricar collares, broches y alfileres de sombrero, y también para pendientes o para decorar trajes típicos y vestuarios teatrales. En la primera mitad del siglo XX, la mayor parte de la producción pasó a fabricar adornos festivos.

¿Cómo surgió el primer adorno?

¿Quién fue la primera persona que tomó un alambrito, enganchó las perlitas y fabricó el primer adorno navideño? Eso jamás se sabrá. Desde hace más de cien años aquí enganchan perlitas de vidrio en alambritos, las moldean creando estrellas, figuritas o animalitos brillantes y de color. Las perlitas no solo son sopladas, sino también plateadas, teñidas, cortadas y moldeadas en las formas más variadas. Familias enteras se incorporaban en esta labor y los fabricantes de perlas comenzaban por las formas más simples y poco a poco iban especializándose en crear diseños más complicados.  Actualmente las perlitas se utilizan para fabricar cualquier cosa que a uno se le ocurra y convenga para la Navidad y las fiestas.

Manufactura en el siglo XXI

En el pueblo Poniklá, al pie de las montañas Krkonoše, se fabrican adornos de la misma manera que en tiempos remotos. No obstante, después de más de cien años, las formas más populares son las más clásicas, especialmente las estrellas navideñas y los copos de nieve. La manufactura en Poniklá cada año produce hasta 150 mil piezas con el uso de 20 mil prototipos. Los adornos no son nada baratos, sin embargo, hay que tener en cuenta que cada pieza es un original fabricado a mano. ¿Cómo se fabrican los adornos hoy día? Una vez al mes, la empresa Rautis, en Poniklá, reparte el vidrio nuevo, en su caso moldes para soplar, entre sus trabajadores y les encarga productos a fabricar. Los cortadores y enganchadores después recogen las perlitas fabricadas, junto al material que necesitarán para crear aquellos productos encantadores que luego se llevan nuevamente a la empresa donde se empacan y se envían por el mundo. El procedimiento de producción, desde luego, es muy similar a las manufacturas antiguas ya desaparecidas. O sea, la gente no va a trabajar a la fábrica. Al contrario, el trabajo va a casa de cada trabajador. Cada trabajador ejerce su labor en casa.

Perlitas como patrimonio cultural

El proceso de producción y la producción como tal, son tan singulares que los adornos de perlas fabricados en el pueblo Poniklá constan inscritos (diciembre de 2020) en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO.
Tú también puedes visitar este lugar y admirar el arte que ya estaba casi extinguido. La empresa Rautis es el último fabricante de adornos de vidrio en Poniklá y ofrece una demostración de la manufactura de adornos navideños de perlitas de vidrio en un solo lugar. Aparte de ello, tienes la posibilidad de probar tu imaginación y destreza en el taller de creatividad o conseguir alguno de los juegos de aficionado en la tienda de la empresa en Poniklá o en su tienda virtual www.rautis.cz y así crear adornos tiernos desde la comodidad de tu casa.