La actual tradición de las romerías nació en base a una leyenda que describe un milagro relacionado con la Virgen María. La leyenda cuenta que en el siglo XIII, durante la gran invasión de los tártaros, se escondían aquí los habitantes de la ciudad cercana. Pero sufrieron la escasez de agua y por eso rezaban a la Madre de Dios. Se dice que un manantial emanó de la tierra en este lugar y una poderosa tormenta obligó a los tártaros a retirarse.
Un centro espiritual en medio de una naturaleza hermosa
A primera vista llaman la atención las dos torres delanteras de la basílica y su cúpula, que se ha convertido en parte indispensable del paisaje. Durante la visita no se olvide de admirar, además de los impresionantes interiores, la portada occidental cubierta de un mosaico que representa a Nuestra Señora de Hostýn, compuesto por 260 mil cristales especiales importados de Italia. Desde la basílica puede bajar por el vía crucis, creado éste por el arquitecto Dušan Jurkovič. En las trece estaciones encontrará trece capillas preciosas construidas al maravilloso estilo modernista de Valaquia. Las obras originales de Jurkovič las encontrará también, p.ej., en el balneario más grande de Moravia, Luhačovice, o en Pustevny, en las montañas de Beskydy.