Terra felix – tierra feliz, así se denominaba el dominio de Frýdlant durante el gobierno del duque Albrecht de Wallenstein. El ambicioso político europeo y jefe del ejército adquirió magníficas propiedades, floreciendo su dominio después de la Batalla en la Montaña Blanca. Tras su asesinato, se asentó en el palacio parte del ejército sueco, siendo afectado el lugar por los tormentos de la prolongada Guerra de los Treinta Años.
El castillo, reconstruido en la época renacentista, se abrió al público en 1801. Por tal razón, llegó a ser el más antiguo castillo - museo en Europa Central. Su atención la captará la sala de armas, en la que encontrará más de mil armas de la época de siglo XII hasta la Primera Guerra Mundial o una exposición dedicada a Albrecht de Wallenstein.