Patinaje en los lagos congelados tiene su magia, pero las ciudades grandes ya les empiezan a competir. Tal vez no disponen con las decoraciones románticas de los bosques debajo de la nieve, pero tienen su magia gracias a los monumentos. Y unas ventajas más. Las pistas de patinaje municipales no siempre están pendientes al clima y gracias a su accesibilidad no siempre es el patinaje el paseo de todo el día. Más se trata de la diversificación de una tarde pasada por ejemplo en Praga o en Brno.
En patines por el diseño, vista panorámica y romántica
Al patinaje con estilo llama la atención la pista de patinaje cerca del restaurante de diseño Pabellón en Brno. La pista de patinaje está completamente cubierta y no hace falta el kiosco con las riquezas calientes y frías para tomar o comer. Si estas con ganas de patinar, pero a Brno llegaste sin equipaje, podrás utilizar el alquiler, donde están preparados patines de todas las medidas.Otra tentación de Brno es el patinaje con vista panorámica. Pista de patinaje en Kraví hora (Monte de vaca) está cerca del observatorio astronómico y del planetario.
También promete un espectáculo la pista de hielo en el complejo deportivo en Hluboká nad Vltavou, de allí puedes ver el fabuloso castillo.
Patinaje debajo dela torre
En la oferta para los patinadores no se queda atrás ni la capital Praga. Y les ofrece pista de patinaje exacto debajo del edificio más alto en toda la metrópoli. El césped de picnic debajo de la Torre de televisión en Žižkov se cambia cada año en la pista de hielo exterior. Si te cansas de las piruetas y de las vueltas, podrás cargar más energía en el bar con las especialidades de grill y con las bebidas calientes. Solo ten cuidado, con el consumo más alto del ponche, vino caliente o bombardino te puede parecer la pista más resbaladiza.Solo pocas pistas de patinaje tienen las decoraciones tan históricas como la pista de patinaje en el Mercado de frutas en Praga, está abierto todos los días y la entrada es gratis. Lo mismo está en el complejo deportivo En Francisco en la Ciudad Vieja. De un lado está el Monasterio Anežský, del otro lado el hospital En Francisco y la Iglesia de San Simón y Judá.
Al patinaje apostan también algunos centros comerciales. Por ejemplo Galería Harfa, cual abrió la pista de patinaje directamente en el techo. Los sábados también está abierta también para el patinaje de noche. Y a los aficionados de los “deportes de hielo” seguro alegra también la Sala de gloria de hockey checo abierta en la Galería Harfa en el año 2015. Podrás probar también la pista de patinaje exterior pública más grande en Praga afuera del centro comercial Arkády Pankrác, pista de patinaje encontrarás también junto al centro comercial Olympia en Brno.