No busques gangas en un centro comercial. Compra en los (súper) mercados del centro histórico de nuestras pintorescas ciudades.
¡Hay mucho para elegir! ¿Tal vez unos adornos navideños que no podrás encontrar en ninguna otra parte del mundo? ¿Una casita de pan de jengibre? ¿O un belén tradicional tallado a mano? Y cuando ya hayas terminado con todas tus compras, date un capricho dulce. ¡Las colmenas de abeja (vosí úly) o las garras de oso (medvědí tlapky) seguro que te encantarán! Los mercados navideños checos en plazas como de mazapán no te decepcionarán.