Primer día: Karlštejn y Křivoklát, residencias reales
Karlštejn es probablemente el más conocido de los castillos en la República checa. Fue contruido por emperador Carlos IV en el siglo XIV para guardar el tesoro real y las reliquias de los santos. La parte más bonita es la Capilla de Santa Cruz, el lugar de custodia de las joyas de coronación checas. La capilla está decorada con piedras semipreciosas y pinturas de tabla de Maestro Theodorico.
Křivoklát fue construido en medio de los boques y valles profundos como la residencia de la dinastía de los Premislitas en el siglo XIII. Reconstruido y ampliado numerosas veces, hoy en día es uno de los castillos más emblemáticos de Bohemia Central. Cada año en agosto se celebran en el patio del castillo la tradicional feria de artesanías y los festejos de tallistas llamados Křivořezání.
Segundo día: Trosky y Kost en el Paraíso de Bohemia
Las ruinas del castillo Trosky son el símbolo del Paraíso de Bohemia. El castillo fue construido en la Edad Media en una formación rocosa, y nunca fue conquistado. Desde las dos torres, llamadas Baba y Panna (la Anciana y la Virgen) se te ofrece una vista excepcional del paisaje.El castillo medieval Kost (en checo significa hueso) debe su nombre a las paredes duras como un hueso. Cerca del castillo se puede recorrer el valle Plakánek, donde se pueden ver formaciones de piedra arenisca, fuentes y estanques naturales.
Tercer día: Český Šternberk y Sázava
Český Šternberk es un castillo emblemático de la región del río Sázava. Los Sternberk fue una de las familias aristocráticas más antiguas y más importantes en el país. Fundaron el castillo en el siglo XIII y el dueño del castillo, Zdeněk Sterneberg, hoy vive allí. En verano puedes aprender algo sobre la halconería, que está inscrita en el Patrimonio Mundial Inmaterial de la UNESCO.
A unos 10 kilómetros de Český Šternberk se encuentra el monasterio de Sázava, uno de los más antiguos del país.
Cuarto día: Palacio Hluboká y České Budějovice
El palacio en Hluboká nad Vltavou es un palacio de cuentos de hadas. Reconstruido en el estilo neogótico atrae por su aspecto romántico y es uno de los más visitados en Bohemia del sur. Viendo sus torres y las salas lujosas, uno espera encontrarse con el príncipe azul en el jardín del palacio.
Originalmente fue fundado como un castillo en el siglo XIII, pero luego la familia noble de los Schwarzenberg decidió reconstruirlo en estilo romántico y crear un parque inglés en el sg. XIX.
El mismo día se puede visitar también la ciudad České Budějovice, que está a 11 kilómetros desde Hluboká nad Vltavou.
Quinto día: Konopiště
Antes de volver a la capital visitamos el palacio Konopiště, cerca de la ciudad Benešov. El palacio fue la residencia de Francisco Fernando D´Este, el heredero el trono autrohúngaro. Su asesinato en Sarajevo dio motivos a la Primera Guerra Mundial. El palacio fue muy moderno para su época – fue uno de los primeros palacios en el país que tuvo ascensores eléctricos, la luz y conductos de agua. Se pueden admirar también una las colecciones de armas y de trofeos de caza. No olvides visitar el jardín del palacio la rosaleda y dar un paseo alrededor del estanque.
Intinerario en coche:
Praga – Karlštejn: 38 km, 50 min.
Karlštejn – Křivoklát: 38 km, 55 min.
Křivoklát – Trosky: 111 km, 1 h 15 min.
Trosky – Český Šternberk: 129 km, 1 h 20 min.
Český Šternberk – Hluboká nad Vltavou:
Hluboká nad Vltavou – Konopiště: 100 km, 1 h 20 min.
Konopiště – Praha: 50 km, 50 min.