Y justo en Loštice en el siglo XIX se estableció la primera fábrica de olomoucké tvarůžky, que sigue funcionando en la actualidad. En Loštice debes visitar el Museo del queso de Olomouc y, además del queso de Loštice, servido tradicionalmente con pan checo, también podrás probar los helados o postres hechos con olomoucké tvarůžky.
¡Y tenemos una buena noticia para los que se preocupan por cuidar su línea! A diferencia de los quesos normales, el queso de Olomouc es ultra dietético, pues contiene solo un 0,5 % de materia grasa. ¡Otra razón más para probarlo! Tendrás muchas oportunidades de probarlo. El queso de Olomouc podrás encontrarlo en el menú de muchos restaurantes por toda Chequia y casi en cualquier bar. Lo mejor es probarlo encurtido, con pan y cerveza checa. Pero también te encantará probarlo frito con triple rebozado o incluso en una pizza.